El verdadero carácter siempre aparece en las grandes circunstancias
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Napoleón Bonaparte
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Tan tranquilas son las personas honradas y tan activas las pícaras, que a menudo es necesario servirse de las segundas

Par Napoleón Bonaparte

Para gobernar hay que saber aprovecharse de los vicios de los hombres, no de sus virtudes

Par Napoleón Bonaparte

Lo imposible es el fantasma de los tímidos y el refugio de los cobardes

Par Napoleón Bonaparte

Cuando no se teme a la muerte, se la hace penetrar en las filas enemigas

Par Napoleón Bonaparte

Apúrate despacio que yo voy deprisa

Par Napoleón Bonaparte

A veces hay que retroceder dos pasos para avanzar uno

Par Napoleón Bonaparte

La bala que me ha de matar aún no ha sido fundida

Par Napoleón Bonaparte

¿Saben lo que es más duro que los reveses de la fortuna? La cruenta ingratitud del hombre

Par Napoleón Bonaparte

Un pueblo sólo podría ser libre si los gobernados fuesen todos sabios y los gobernantes todos dioses

Par Napoleón Bonaparte

No son las riquezas ni el esplendor, sino la tranquilidad y el trabajo, los que proporcionan la felicidad

Par Napoleón Bonaparte

El hombre es como un número: sólo tiene valor por su posición

Par Napoleón Bonaparte

Jesús solo fundó su imperio en el amor; y hasta hoy muchas personas morirían por Él

Par Napoleón Bonaparte

Los soberanos deben perdonar las faltas y no olvidarlas jamás

Par Napoleón Bonaparte

Sólo con un poder absoluto se puede vencer la necesidad

Par Napoleón Bonaparte

Los hombres, en general, no son sino niños grandes

Par Napoleón Bonaparte